Día 8 al Día 10
Seguí alimentando a la masa madre de la misma forma: retiraba el 80% de la mezcla y mezclaba el 20% restante con 50 gr. de agua y 50 gr. de harina de la que mezclé el primer día (mitad blanca y mitad integral).
Todos los días como a las 2-3 horas la masa empezaba a notarse que crecía y tenía burbujitas, lo que significa que está viva, y pues después de un rato la masa se desinflaba… lo cual es perfectamente normal.
Día 11
Para el día 11 decidí meterla en refrigeración, y a partir de ahí, y como me enseñaron en mi curso de panadería, la alimentas una vez a la semana y la dejas en refrigeración y no le pasa nada.
Ahora esperaré a que pase una semana (que es el sábado) para alimentarla y seguir con el proceso, pero ahora más lentamente en el refrigerador.
Planeo utilizar ya la masa madre para la próxima semana y ya les estaré contando cómo va este experimento. 😉 Yo quiero conservar la masa madre en el refrigerador y siempre tener, porque resulta que la receta de Tartine dice que sólo utilices 1 cucharada de la masa madre que he venido cuidando y tires todo lo demás! y pues noooo es mucho trabajo como para tirarla! 😛
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