Les propongo esta botana muy fácil de armar!
El secreto para que quede super rico, es buscar un buen artesanal, un buen queso de cabra y que los duraznos sean de la época: dulces!
Si no tienen la crema de balsámico, pueden hacer una reducción de vinagre balsámico: pones a hervir el vinagre a fuego bajo, hasta que quede 1/4 del volumen original 😉
Crostini de queso de cabra con duraznos
4 porciones
4 rebanadas delgadas de pan artesanal
8 hojas de espinaca, desinfectadas
Queso de cabra, el suficiente para los crostini
1 durazno
Crema de balsámico o reducción de vinagre balsámico
El pan lo tostamos ligeramente.
El queso lo podemos calentar en una sartén antiadherente, voltéandolo rápidamente. Si el queso fuera muy suave omitir este paso.
Armamos los crostini: pan, espinacas, queso, duraznos rebanados muy delgados y ponemos unas gotas de crema de balsámico o reducción de balsámico.
Servimos de inmediato.
Que ricoooo, se me hizo agua la boca, con lo que me encanta la combinación de durazno y balsámico más el queso de cabra!
Gracias, Madeleine por esta sugerencia para un lunes sin carne, copiado y anotado.