Empezamos la semana de las galletas con los biscotti!

Biscotti de almendras

Estas galletas deben de quedar duras, ya que van remojadas en el café, té o chocolatito… duran muchísimo tiempo ya horneadas, eso sí, bien guardadas en un recipiente hermético.

Son fáciles de hacer y muy ricas.

En esta ocasión me apoyo en fotos viejitas de otros biscotti (es la misma forma de hacerlos), puesto que perdí las fotos de la preparación 🙁

Lo del chocolate es opcional, yo se lo puse para que se vieran más bonitos! 😉

Biscotti de almendra
30 galletas, aproximadamente

115 gr. De mantequilla suavizada, sin sal
1 taza de azúcar
3 huevos
1 cdita. De extracto de naranja
2 tazas de harina
2 cditas. De polvo para hornear
1/8 cdita. De sal
½ taza de almendras picadas
2 cdas. De leche
¼ taza de azúcar
100 gr. De chocolate obscuro
Almendras fileteadas picadas grueso para adornar

Se acrema la mantequilla junto con la taza de azúcar. Cuando esté suave y esponjoso se añaden los huevos de uno por uno, y también el extracto de naranja.

Se mezclan los ingredientes secos: harina, polvo para hornear y sal.

Añadir los secos a la mezcla y si están trabajando con batidora, sólo mezclar lo mínimo para que se junten los ingredientes.

Sacar y añadir por último las almendras picadas, incorporar.

Si la mezcla quedara muy aguada, hay que llevarla a refrigeración por 1 hora (a mí eso me sucedió) si no, en 2 charolas con papel aluminio separar la mezcla entre ambas, a partes iguales.

Formar dos salchichas largas y gruesas, de 24 cm. De largo por 6 cm. De ancho, aproximadamente.

Barnizar con la leche y espolvorear el cuarto de taza de azúcar sobre cada rollo.

Hornear a 200°C por 15 a 20 minutos, cuando estén dorados ligeramente, sacar y dejar enfriar un poco. Bajar el fuego del horno a 170°C.

Cortar cada rollo en forma diagonal cada galleta y poner con el lado cortado hacia abajo en la charola. Volver a meter al horno por unos 10 minutos, hasta que doren ligeramente, voltear del otro lado y dejar otros 10 minutos. Apagar el horno y dejar dentro del horno, con la puerta entreabierta para que se terminen de secar.

Ya bien frías, se mete un lado en el chocolate derretido y se le espolvorea un poco de almendra fileteada.

Poniendo en chocolate

Saliendo del chocolate

Guardar en un recipiente hermético.

Todos los que salieron

De hecho, para mí, es mejor meterlas en el chocolate hasta el último momento antes de obsequiarlas. Yo las guardé por casi 2 semanas en un recipiente hermético. 😉